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El Ministerio de Igualdad e Interior se han emplazado este martes a trabajar estrechamente para garantizar el ejercicio de las libertades y el derecho a la visibilidad del colectivo LGTBI y han acordado establecer «cauces de trabajo común» y otras medidas de seguridad coincidiendo con el Orgullo que se celebra este mes.
En una reunión entre la Dirección General (DG) de Diversidad Sexual y Derechos LGTBI y la Oficina Nacional de Lucha Contra los Delitos de Odio, se ha destacado que la orientación sexual y la identidad de género son la tercera causa de delitos de odio en nuestro país, por detrás del racismo/xenofobia y la ideología. En el último informe del Ministerio del Interior de 2018 se recogieron 259 denuncias por LGTBIfobia.
Por ello, se han establecido «cauces de trabajo común» para garantizar la visibilidad de este colectivo y el ejercicio de los derechos fundamentales, incidiendo especialmente en «la necesidad de la denuncia de estos delitos y en establecer puentes entre las víctimas y las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado», según ha informado el Ministerio de Igualdad en un comunicado.
En este sentido, representantes de Igualdad han trasladado la «preocupación existente entre las organizaciones LGTBI» por algunas recientes agresiones. Con el fin de prevenir y evitar discriminaciones, especialmente en fechas cercanas al Orgullo LGTBI, ambos ministerios han apostado por trabajar conjuntamente para extremar la seguridad.
Se ha acordado también fomentar las denuncias de cualquier incidente de discriminación o agresión por motivo de orientación sexual, identidad o expresión de género, o características sexuales, porque, según el departamento liderado por Irene Montero, los datos muestran «un gran nivel de infradenuncia». Así, una de las prioridades será establecer los cauces adecuados para que las personas LGTBI sepan cómo presentar la denuncia «con la confianza absoluta en que serán tratadas como es debido».
