Una joven de 24 años ha sido víctima de una brutal paliza homófoba en pleno centro de Madrid, en concreto en el icónico barrio de Chueca.
Al grito de «bolleras de mierda», «estáis enfermas» y «tendrías que estar todos en una hoguera», un hombre la emprendió contra Irene y otra chica que con la que paseaba de la mano.
El agresor la atacó por la espalda, propinándole varios golpes y pronunciando graves insultos. «Noté cómo alguien me empujaba por detrás, me caí de espaldas y ahí empezó a darme patadas», ha señalado. La joven todavía cojea, le cuesta andar, tiene dolores en el brazo y varios hematomas por todo el cuerpo.
Una paliza que, sin duda, supone una agresión a nivel físico pero también moral. «Es como si aparte de la paliza, me la hubiesen dado también mentalmente». Si bien, tiene claro que si se encontrara de frente con el agresor le diría que «deje vivir a la gente y que si algo no le gusta, mire para otro lado o se quede en su casa».
No es la primera vez que ha sufrido un agresión por ser lesbiana y por ser mujer, pero no piensa tener miedo y asegura que siempre irá «de cara».
Al respecto, asociaciones y activistas del colectivo LGTBI indican que, en muchos casos, hay un especial ensañamiento con las mujeres.